RECETA DE TORRIJAS DE LA ABUELA

Las torrijas, son una receta típica de la Semana Santa y de carnaval. Aunque, en realidad las puedes realizar en cualquier época del año. Consiste en unas rebanadas de pan de uno o dos días, mojadas en abundante leche o vino dulce, previamente aromatizados con cítricos y otras especias. Es una receta muy fácil de hacer y que queda deliciosa. Aquí, vamos a hacer una receta de torrijas con ambos ingredientes. Vino dulce y de leche.


INGREDIENTES PARA UNAS 15 UNIDADES:
300g de pan especial para torrijas, o de pan del día anterior.
Cáscara de naranja y de limón.
1 rama de canela.
1/2 rama de vainilla.
1l de vino dulce o 1l de leche.
2 huevos.
Aceite, para freirlas.
200g de azúcar (solo si son de leche)
3 cucharadas de azúcar y una de canela en polvo, para ponérselo al final.

COMO HACER TORRIJAS TRADICIONALES CON LECHE O CON VINO


1.- Si las vamos a hacer con vino, 2 días antes de preparar nuestras torrijas, ponemos el vino junto con las peladuras de naranja y limón (sin echar la parte la blanca de la misma) sobre un cuenco. Añadimos también la canela y la vainilla. Dejamos macerar durante al menos esos dos días en el frigorífico.

2.- Si las hacemos de leche, ponemos la leche en un cuenco, junto a los mismos ingredientes que hubiesemos echado si las fuesemos a hacer de vino, pero añadiéndole además 200g de azúcar. Calentamos la leche con todos estos ingredientes y, justo antes de que rompa a hervir (no interesa que la leche hierva, pues coge un saber desagradable) tapamos el cuenco, y lo dejamos infusionar durante al menos 2 horas.

3.- Cortamos el pan en rebanadas para nuestras torrijas. Deben tener un grosor de 2 o 3cm. Las colocamos sobre un recipiente muy grande, como la fuente de horno, dejando una pequeña separación entre una rebanada y otra

4.- Echamos sobre ellas la bebida que hayamos elegido, colada para eliminar las cáscaras de los cítricos, la canela y la vainilla. Dejamos que repose todo unos 5 minutos. Para que el pan se empape bien y absorba bien el vino o la leche

5.- Pasado el tiempo, damos las vuelta una a una a las rebanadas de pan. Para que se empapen también por la otra cara. Dejamos otros 5 minutos.

6.- Ahora, vamos a pasar las torrijas por huevo batido y a freírlas. Hazlo con mucho cuidado porque la torrija estará muy empapada y se puede deshacer con facilidad. Así que una a una, las cogemos con las manos, las pasamos por ambas caras en huevo batido y las freímos en abundante aceite de oliva muy caliente. Alrededor de 1 minuto por cada una de sus dos caras. Después las retiramos sobre papel absorbente

7.- Finalmente, cuando hayamos frito todas las torrijas y se hayan enfríado un poquito, ponemos tres cucharadas de azúcar en un plato y una cucharada de canela en polvo. Lo mezclamos bien y después pasamos por aquí las torrijas. Por sus dos caras.

Y ya tendremos una torrijas listas para comer. Es mejor comerlas totalmente frías. No es necesario refrigerarlas para conservarlas y, pueden durarnos varios días antes que se estropeen pero, la verdad… ¡Probablemente mucho antes acaben en tu estómago o en el de tu familia!